El Patrón de la obra pública provincial, como llaman a Fabrizio Cardini en el ambiente de la construcción, tendría las horas contadas. El empresario madrynense supo hacerse de las obras más importantes de los últimos años pero su reinado llegaría a su fin el próximo 10 de diciembre con la llegada de Ignacio Torres a la gobernación.
“Lo vamos a sacar cagando”, adelantó, sin eufemismos, el mandatario electo cuando le consultaron hace unos días, en el canal América 24 de Capital Federal, por el destino del empresario. “A él y todos los que quieren aprovecharse del Estado”, remarcó
A lo largo del gobierno de Mariano Arcioni, Cardini se convirtió en el empresario de la construcción más importante del Chubut, recibiendo miles de millones de pesos para llevar adelantes obras faraónicas. A partir de su cercana relación con el ministro de Infraestructura, Gustavo Aguilera, consiguió, por ejemplo, que le adjudicaran de forma directa la reconstrucción de la Casa de Gobierno por más de $100 millones.
La obra debió terminarse a comienzos de este año, pero está muy lejos de culminarse. Sin embargo el empresario cobró adelanto y consiguió dos prórrogas en el plazo de fin de ejecución y que le actualicen los costos de construcción en dos oportunidades por más de $115.701.574, 73.
Cobrar adelantos, no realizar las obras y pedir mayores costos ha sido una constante en los años de reinado de Cardini en el mundo de la obra pública provincial: lo hizo con los presedimentadores de Trelew, donde la obra fue adjudicada en julio de 2021 por un valor de $ 473.995.360,73 y un plazo de obra de 660 días corridos, finalizado el período comprometido para la ejecución, Cardini consideró que los fondos eran insuficientes y reclamó un 40 por ciento más (unos 200 millones de pesos) para terminarla.
El mismo accionar parece encaminarse en el interconectado Camarones-Garayalde, donde Fabri SA tiene a cargo la ejecución del “Sistema Interconectado Eléctrico Provincial – II Etapa” por $ 993.744.223,81. El contrato se firmó hace un año, el 23 de agosto de 2022, la empresa ya cobró el adelanto y todavía no colocó un solo poste. No sería extraño que en los próximos días aparezca un nuevo análisis técnico y económico del gobierno y asignen mayores partidas para que la obra avance.
La semana pasada, el concejal de Comodoro Rivadavia Omar Lattanzio anuncio que denunciará a la Empresa Fabri S.A por “robarle el dinero a los comodorenses”.
Obras inconclusas, digitación de las adjudicaciones, pagos de adelantos y de mayores montos por muchos millones de pesos han sido una constante en el manejo de la obra pública del gobierno de Mariano Arcioni. Durante estos años Cardini se codeó con funcionarios, eligió las obras que quería realizar y los montos que deseaba cobrar por ellas; en La Voz de Chubut denunciamos desde hace más de un año que Cardini se maneja como el auténtico dueño y patrón de la construcción en Chubut.
Las declaraciones del gobernador electo, Ignacio Torres, sobre transparentar el manejo de la obra pública y sacar para siempre a los vivos, amigos del poder, que se enriquecen a costa de la plata de todos los chubutenses, representan una esperanza para terminar con un mudos operandi corrupto que está presente en la provincia desde, al menos, lo últimos 20 años.
El Patrón de la obra pública provincial, como llaman a Fabrizio Cardini en el ambiente de la construcción, tendría las horas contadas. El empresario madrynense supo hacerse de las obras más importantes de los últimos años pero su reinado llegaría a su fin el próximo 10 de diciembre con la llegada de Ignacio Torres a la gobernación.
“Lo vamos a sacar cagando”, adelantó, sin eufemismos, el mandatario electo cuando le consultaron hace unos días, en el canal América 24 de Capital Federal, por el destino del empresario. “A él y todos los que quieren aprovecharse del Estado”, remarcó
A lo largo del gobierno de Mariano Arcioni, Cardini se convirtió en el empresario de la construcción más importante del Chubut, recibiendo miles de millones de pesos para llevar adelantes obras faraónicas. A partir de su cercana relación con el ministro de Infraestructura, Gustavo Aguilera, consiguió, por ejemplo, que le adjudicaran de forma directa la reconstrucción de la Casa de Gobierno por más de $100 millones.
La obra debió terminarse a comienzos de este año, pero está muy lejos de culminarse. Sin embargo el empresario cobró adelanto y consiguió dos prórrogas en el plazo de fin de ejecución y que le actualicen los costos de construcción en dos oportunidades por más de $115.701.574, 73.
Cobrar adelantos, no realizar las obras y pedir mayores costos ha sido una constante en los años de reinado de Cardini en el mundo de la obra pública provincial: lo hizo con los presedimentadores de Trelew, donde la obra fue adjudicada en julio de 2021 por un valor de $ 473.995.360,73 y un plazo de obra de 660 días corridos, finalizado el período comprometido para la ejecución, Cardini consideró que los fondos eran insuficientes y reclamó un 40 por ciento más (unos 200 millones de pesos) para terminarla.
El mismo accionar parece encaminarse en el interconectado Camarones-Garayalde, donde Fabri SA tiene a cargo la ejecución del “Sistema Interconectado Eléctrico Provincial – II Etapa” por $ 993.744.223,81. El contrato se firmó hace un año, el 23 de agosto de 2022, la empresa ya cobró el adelanto y todavía no colocó un solo poste. No sería extraño que en los próximos días aparezca un nuevo análisis técnico y económico del gobierno y asignen mayores partidas para que la obra avance.
La semana pasada, el concejal de Comodoro Rivadavia Omar Lattanzio anuncio que denunciará a la Empresa Fabri S.A por “robarle el dinero a los comodorenses”.
Obras inconclusas, digitación de las adjudicaciones, pagos de adelantos y de mayores montos por muchos millones de pesos han sido una constante en el manejo de la obra pública del gobierno de Mariano Arcioni. Durante estos años Cardini se codeó con funcionarios, eligió las obras que quería realizar y los montos que deseaba cobrar por ellas; en La Voz de Chubut denunciamos desde hace más de un año que Cardini se maneja como el auténtico dueño y patrón de la construcción en Chubut.
Las declaraciones del gobernador electo, Ignacio Torres, sobre transparentar el manejo de la obra pública y sacar para siempre a los vivos, amigos del poder, que se enriquecen a costa de la plata de todos los chubutenses, representan una esperanza para terminar con un mudos operandi corrupto que está presente en la provincia desde, al menos, lo últimos 20 años. (FUENTE LAVOZDECHUBUT)