Como ocurrió en el primer paro nacional de la CGT al gobierno de Javier Milei en enero, una de las polémicas de la jornada la protagonizaron el cotitular de la central sindical Pablo Moyano y el ministro de Economía, Luis Caputo.
Luego de que Caputo se solidarizó con los trabajadores que “no pudieron concurrir a su trabajo por la falta de transporte”, Moyano le respondió con dureza.
Dijo que el hecho de que “Caputo se solidarice con el daño que hizo, cuando se afanó el préstamo de los 45 mil millones de dólares, es como que Barreda hablara de la familia”.
«Si ellos ratifican el rumbo económico, nosotros vamos a seguir ratificando el plan de lucha de la CGT«, advirtió Moyano.
Ante esas declaraciones, Caputo retrucó: “Gracias Pablo por tus continuos insultos. Son bienvenidos, ya que vos sos todo lo que ningún argentino de bien quiere ser. No representas a nadie. Sos un mero matón al que el país entero detesta”.
Y además, retomó la polémica del primer paro, en el que Moyano le había advertido a Caputo que los trabajadores podían terminar “tirándolo al Riachuelo”. Al respecto, Caputo disparó: “Te cuento que nadar sé, así que si me querés limpiar probá algún otro método”.
También habló otro de los cotitulares de la CGT, Carlos Acuña, quien le pidió a Milei que «vaya a los barrios a preguntarle a los trabajadores si les alcanza» el salario.
Acuña, secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio, retrucó a Milei, quien dijo que «los salarios le están ganando a la inflación».